Era nuestra primera clase de habilidades informáticas,
emocionados Alex y yo, deseábamos aprender el desarrollo de tecnología,
entonces en el taller de habilidades informáticas conocemos al docente Benjamín
Maraza Quispe, como introducción a su curso nos trae una Placa Arduino Uno, una
placa Protoboard y unos cuantos cables, para aprender a relacionar la
tecnología con lo material (relacionar software y hardware) de esta manera comenzamos
a armar pequeños prototipos.
En nuestra curiosidad y pasión por la investigación surge
una idea y un desafió, ya teníamos idea acerca de la Respuesta Galvánica de la
Piel, pero ahora como demostraríamos este principio, era necesario la ayuda de
la tecnología y de nuestro maestro, así es como esta idea se va nutriendo día a
día, trabajamos duro experimentamos, fallamos, seguíamos intentándolo pero nunca
nos dábamos por vencidos hasta que por fin lo logramos
Con la feria de ciencias ya cerca era necesario: un informe
de investigación del proyecto y una maqueta para lucir el prototipo, trabajamos
en el informe con la ayuda de muchos docentes aprendiendo de ellos y aclarando
nuestras dudas, ahora nos faltaba una maqueta teníamos un montón de ideas las
cuales fueron:
- Realizar una ciudad caótica por el estrés y la ansiedad
- Un ojo grande que en la pupila exhiba el prototipo
- Un humano y que en la parte de su cráneo muestre el prototipo
- Una cuna que albergue el prototipo
- Dejarlo así (pero se vería muy simple y nada elaborado)
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Entonces con el profesor tratamos de unir ideas y extraer lo más
sustancial y por fin se nos ocurrió:
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La exposición era muy importante.
Al inicio nuestra exposición era desastrosa con errores
garrafales y nada de expresionismo con nuestro cuerpo, el profesor nos motivaba
diciéndonos.- “Todo en esta vida se aprende si tu prácticas” Nos daba
recomendaciones, nos enseñaba y nos mostraba las exposiciones de grandes
maestros y también sus videos de sus propias experiencias y fuimos puliendo la
exposición día a día. Dejamos todo listo la noche anterior.
Muy temprano con las herramientas necesarias (sillas,
caballetes, las pizarras de exposición, etc.) partimos al lugar donde se
llevaría a cabo la primera fase. Nos acompañó el profesor de bioquímica Donovan
Tito Quispe, gran maestro un espléndido tutor (él fue una de la piezas muy
importantes para realizar este proyecto)
La inauguración fue emocionante, mi asombro era inmenso
porque yo nunca había asistido a una Feria de Ciencias, las explosiones
llegaban, habíamos practicado mucho pero sentía nervios y timidez, el maestro
Donovan nos alentaba conjunto al maestro Benjamín, el jurado estaba cerca y
comencé a ponerme muy nervioso y a
cometer errores garrafales.
Le conté al maestro Benjamín lo sucedido con el jurado, pero
siempre optimista me decía.- “Es para que cojas experiencia hijo”
Tenía fe de que lo haríamos mejor con el segundo jurado al día
siguiente y así fue, cogí inspiración y trate de hacerlo bien, saque lo mejor
de mí y explique bien el proyecto, luego de la exposicion me sentía satisfecho
conmigo mismo porque sentía que había hecho bien mi trabajo, esperábamos
ansiosos el resultado, ya se hacía tarde y nadie anunciaba nada, nos estábamos
retirando del lugar cuando comenzaron a anunciar emotivamente, estaba muy
nervioso.
Desesperado escucho el primer lugar, era de otra institución
pregunte a un docente y felizmente era de otra categoría.
Aliviado un poco, esperaba el resultado de la categoría en
la que participaba Ciencias Básicas y comienzan por el tercer lugar, no éramos nosotros,
hay que nervios el segundo y tampoco éramos nosotros y dijo el primero una gran
emoción al saber que éramos el primer lugar, dentro de mi salte de alegría y fui
corriendo a avisar al maestro Benjamín, él emocionado no me lo creía pero era
realidad habíamos pasado la primera fase.
Luego de la feria el maestro nos invito a un merecido almuerzo.
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